miércoles, 11 de diciembre de 2019

CONVERSANDO CON LOS PRIMEROS CRONISTAS COMUNALES DEL MUNICIPIO VALERA


JOSÉ ROSARIO ARAUJO. El pasado 29 de noviembre fueron juramentados los Cronistas Comunales de la Parroquia La Beatriz en la Sesión Extraordinaria de los 41  Aniversario de esa populosa parroquia del Municipio Valera. 

Son los primeros Cronistas Comunales del Municipio Valera y tendrán en sus hombros el deber de registrar la historia de las comunidades, tanto   sus inicios,   como la historia  que se está construyendo.
Por fin la historia de las comunidades no estará más escondida y quien mejor que la misma comunidad la que la narre.

Ese día tuve la oportunidad de conversar con alguno de ellos como lo fueron Alejandro Acosta, Isaías de Jesús Peña de la 1° Etapa, Jorge Álvarez, Víctor Manuel Díaz Valecillos     de la IV Etapa,  Ramón Carrizo del sector La Chimenea,  que me dieron sus apreciaciones como eran sus sectores en sus inicios. 

Para llegar a la Urb. La Beatriz era prácticamente una travesía, había que bajar por un camino que da al rio detrás de la casona,  en la entrada del ahora del viaducto.
Había un puentecito donde se encuentra ahora la tubería, había que cruzar eso para llegar a donde ahora están los apartamentos.

Señaló que la zona estaba empezando a      poblarse y en los primeros tiempos  la gente; como no había muchos; se conocía casi toda.
El clima era muy diferente, en las mañana había roció, cosa que ha cambiado por la depredación de medio ambiente, ya que se ha ido poblando de una forma no planificada.

Al   poco tiempo llegaron las líneas de transporte público, que venían del Barrio El Milagro, pero el transporte no era fácil ya que había muy pocas unidades.

Las cosas fueron mejorando y se fueron colocando negocitos, la gente ya no compraba en Valera y de esta forma empezó el desarrollo comercial de la zona.
En  los Bloques de la I  Etapa la gente fue llegando graneada  paulatinamente, así que los edificios no se fueron poblando sino por partes, llegando personajes como la señora  Candelaria, una de las fundadoras, recuerda uno de los cronistas y una enfermera que aunque no era graduada colaboraba con la gente inyectándolos.

El primero CORPOMERCADEO era dirigido por un señor Díaz, al tiempo  se puso la primera Quincallería que era atendida por una señora que se llamaba Rosalba, la primera farmacia      llamada Farmacia La Beatriz.

La primera iglesia que se fundó aquí estaba donde se encontraba  el Modulo y la escuela, la iglesia y el modulo funcionaban en la misma edificación y después se cambió la Iglesia para la primera etapa donde todavía se mantiene.

En 1980 se inicia la construcción de esta etapa de la Parroquia La Beatriz y para el año de 1983 les fueron adjudicados las soluciones habitacionales en el mes de agosto.
Les dieron la carta de adjudicación y todo el mundo al salir salieron corriendo para ver cuál casa  les tocaba, ver cuál era el número de vivienda que les  tocaba y meterse como unos  salvaje en las viviendas.

Para poder llegar a la IV Etapa  era muy dificultoso, ya que vías de penetración no había, el terreno lleno de lodo, huecos e incluso el  que tenía un carro le daba miedo meterlo por lo accidentado del terreno, muchas personas dejaban los vehículos   en los bloques y se venía hacia esa zona caminando.

Cuando les entregaron las viviendas no tenían puertas, sin pocetas, con los bloques de las paredes sin friso, el piso rustico, la casa sin lavamanos, tampoco contaba con las partes eléctricas, tampoco había aguas servidas, ni aguas blancas, ni asfalto, ni luz.

 Desde ese tiempo comenzó una lucha, por eso se llama la Avenida Principal y el sector 1 se llama Gregorio José Mejía en honor al fundador, ya que cuando llegaron se organizaron como Asociación de vecinos y él era su Presidente.

A través de luchas, protestas, trancas   de la vía principal subiendo, ya que no existía el Viaducto, solamente la vía por donde se subía y era trancada por ellos, siendo Méndez Quijada el Gobernador y Jaime Lusinshi Presidente de la Republica, lograron medio, medio que les resolvieran lo de los servicios públicos.

La urbanización La Beatriz lleva el nombre en honor de una hija de los antiguos propietarios de la Hacienda y antes de estar los edificios eran grandes cañaverales, sembradíos de cambures y la entrada de la hacienda por la parte de abajo.

Los Cronistas Comunales se sienten muy orgullosos por pertenecer a esta parroquia, ya que esta es una de las más organizadas, con un gran proyecto para un brillante futuro.

Foto: Los Cronistas Comunales de la Parroquia San Luis.

lunes, 9 de diciembre de 2019

VENANCIO GONZALEZ PATRIMONIO DE VALERA


42 años en la Av.9 con su kiosco González

Hay personas que son partes de una ciudad, que nunca puedes concebirla apartando estos personajes.  
 Llevo años viendo a Venancio González cuando  pasó por su negocio, el kiosco de periódicos y revista  González  para dirigirme a mí trabajo.
 
Él viene a ser tan patrimonio  de la ciudad como la misma Iglesia San Juan Bautista, las Plazas Bolívar y San Pedro
Siempre de una manera u otra Venancio y yo conversamos, llevamos años en eso. Como yo muchas personas cuando pasan por la Av. 9 con calle 8 tienen como regla pararse a conversar con el buen amigo.

Este valerano, nacido en la Puerta, vivió desde muy pequeño en el Páramo de la Mocotí, lleva el amor a la ciudad de las Siete Colinas muy arraigado, nunca olvido su terruño a pesar de que vivió 17 años en Caracas.

Hace 42 años Venancio todas las mañanas; a las 6:00 a.m;  está en su kiosco de la Av. 9 compartiendo con sus clientes y amigos, siempre presto para dar buen trato y amistad a todas las personas que se acercan a su negocio, sin importar la situación que se esté viviendo.

Conocí a Venancio a finales de los años 80 cuando me convertí en su cliente comprándole periódicos, revistas y libros y nunca he visto a este valerano con una mala cara o con una mala respuesta hacia alguien, siempre con una broma o un chiste a flor de piel.

González es un hombre que con su trabajo, con el buen trato que le da a la gente  engrandece la ciudad de Valera. Continuar el ejemplo de él y de todas las personas que aportan a la tierra de Mercedes, debe ser el norte nuestro rumbo al Bicentenario para de estar forma poder hacer de esta tierra un lugar mejor para vivir. 

Foto 1: Venancio en la actualidad.

CON LOS PORTADORES PATRIMONIALES


Caminante no hay camino, se hace camino al andar
Antonio Machado

JOSÉ ROSARIO ARAUJO. Una innovación en el municipio Valera es el nombramiento de Portadores Patrimoniales a personas de las comunidades,  que han sido representante de ese sentir comunitario de los sectores de la Ciudad de las Siete Colinas.

Este reconocimiento  nos hace sentir orgullosos como valeranos,   innovación en esta nueva gestión municipal  presidida por el Concejal Leonardo Anzola,  y es sin lugar a ninguna duda, un justo  reconocimiento a las personas que han dado su silencioso aporte a las comunidades, que siempre habían estado invisibilizados y que por primera vez son recompensados al ser nombrados Portadores Patrimoniales de la comunidad por ese quehacer diario por su sector.

Al ser nombrados Portadores Patrimoniales estas personas recibirán una digna y justa  retribución por parte de nuestro ente edilicio  y de sus comunidades a ese amor y dedicación por sus sectores.

Como periodista del Concejo Municipal de Valera he sido testigo del nombramiento como Portadores Patrimoniales de varios sectores de la ciudad y  cuento con varios amigos que han sido escogidos para este galardón cosa que me ha llenado de satisfacción, pero nunca me había conmovido tanto como el pasado viernes  06 de diciembre cuando fue nombrado el señor Ramón Briceño, habitante del sector Blanca de Pérez de La Floresta,   quien no pudo contener su emoción y se derramó en llanto, cosa que  hizo que todos los presentes contuviéramos la emoción que nos llenó en ese momento a duras penas .

En nuestro municipio se han enaltecido las comunidades,  tomándose en cuenta como nunca se había hecho,  cuando se les ha dado la misión de escribir su historia  con los Cronistas Comunales y galardonar a sus hijos más destacados nombrándolos Portadores Patrimoniales.

Eso era una necesidad imperiosa de la ciudad, ya que nunca; hasta estos tiempos; los sectores narraron sus comienzos y mucho menos su transitar por la vida. 

Juntos, todos los sectores de Valera, escribiremos la historia de la ciudad después  de su Centenario de la cual hay muy poco escrito sobre lo acontecido en las comunidades.

En la múltiples conversaciones que he tenido a través de estos últimos cuatro años con mi buen amigo Yherdyn Peña; docente de la Universidad de Los Andes, Coordinador de la Red de Memoria Historia y Patrimonio del Estado Trujillo y miembro de la Comisión  de Historia  del Bicentenario, me ha señalado la necesidad de que la historia de las comunidades sea tomada en cuenta.

Yherdyn en sus diferentes ponencias y en el Diplomado de Cronistas Comunales del cual he sido alumno y luego facilitador,  ha sido enfático que debemos bajarnos del caballo, superando esa teoría de que la Historia Militar y Política sea la única que estudiada.

La Crónica sobre los pueblos  debe abarcar todas sus facetas y es muy necesario que en ellas tengan  un papel importante la historia del desarrollo de los sectores y esa necesidad fue enmarcada en la Ordenanza de Cronista Oficial y Cronistas Comunales realizada por el Concejal Anzola y el Abg. Candelario Briceño.

Estoy seguro que vamos por construyendo un  buen camino como lo dijo el poeta Antonio Machado.

Foto: Ramón Briceño, Portador Patrimonial del Sector Blanca De Pérez.



miércoles, 27 de noviembre de 2019

TRADICIONES, MITOS Y LEYENDAS DE LA POBLACIÓN DE MENDOZA


JOSÉ ROSARIO ARAUJO. Conversando con la cultora y amiga Katiuska Velazco nos contó sobre las tradiciones de Mendoza de donde es oriunda. Se refirió que en las fiestas de matrimonio  se preparaba un pavo relleno para obsequiar a los invitados y para esas ocasiones su abuela muy pendiente,  rellenaba el pavo de carne, jamón, chuleta y tocineta.

Antes de sacrificar al animal su abuela lo emborrachaba, luego lo cocinaba en agua y concluía llevándolo  al horno.

También se preparaba una torta  de tres pisos, siendo esos platos patrimonio de esos cerros que rodean la población de Mendoza, que eran la cordillera parte de  arriba y el cerro La Guaira que sale a La Culebrina.  

De esos sectores, Katiuska recuerda que hacían grandes parrandones que duraban hasta el otro día, en las festividades decembrinas en los años 70.

Existían grupos de gaitas de los cuales  recuerda a Los Golperitos, el grupo de gaitas La Guaira , recordando a Silvio Ocanto.

Con esos grupos de gaita se iban a la plaza comenzando en la primera misa de aguinaldo.

La fiesta de San Isidro era muy animada y la gente amanecía en la plaza, esta era otra de las coloridas celebraciones de esta zona.

Katiuska Velazco también recuerda las paradas militares que dirigía la Prof. Aura Briceño de Monreal que dió a conocer la vida  de este prócer mendocino y luchó mucho por la restauración de la Casa Natal    del héroe.

Yo mismo fui testigo de varias, ya que me tocó acompañar a mi papá y a mis tias-madres. Eran ellos muy amigos de esta docente que es orgullo de la población mendocina.

De los mitos y leyendas, la cultora de Mendoza,  recuerda a la Llorona, que contaba la gente que salia una mujer vestida de blanco y cuando se oía lejos era porque estaba cerca y cuando se oía cerca era porque se encontraba lejos. Se decía que donde había niños pequeños era donde más salía.

Evoca la cultora que oyó cuentos de botijas encontradas llenas de monedas.

La parroquia Mendoza  existe otra leyenda que narra que de la caja de agua que había en El Chorrerón sacaron un muerto hace 17 años para poder hacer la caja. El cadáver estaba completo y lo llevaron a Mérida.

Esa historia la narró Cesar Labastidas que se encontró en el sitio cuando ocurrió ese acontecimiento , igual el Sr. Maldonado que también fue testigo.

En Mendoza no faltan los mitos de encantos y aquí existe un mito de  un hombre que arrastra una urna y cuando ve a una persona le pasa por encima llevándose su alma. Ese relato cuentan que ocurre en el sector de la Mocojó, donde pasa el río y sale en Semana Santa.

No podría faltar en la zona  la leyenda de un hombre que  vendió su alma al diablo y se dice que ocurrió en el puente conocido como el Puente del Diablo, que supuestamente le faltan ladrillos porque no pudo terminarlo antes que amaneciera como había llegado en su negociación con el supuesto espíritu maligno.

Nuestro municipio está plagado de leyendas y mitos, colorido que nos hace sentirnos orgullosos de nuestra idiosincrasia y de ser valeranos, trujillanos y venezolanos.

CRONICAS CORTAS DE NUESTRA TIERRA

VALERA PRINCIPIOS DE SIGLO XX


Leyendo a Gallegos Celis, primer Cronista de nuestra Valera pude obtener varios datos que creo que son de importancia para conocer nuestra historia.

-El caserío Agua Clara fue fundado por José Maria Espinoza en 1840, hizo una casa de muy solida construcción y esa vivienda tenia una capilla  el 20 de mayo de 1858, siendo bendecida por el sacerdote doctor Juan Hilario Boset.

Esta capilla sirvió de panteón para la familia Espinoza, encontrándose allí enterrados sus fundadores. El cuidado del recinto sagrado lo tuvo por mucho tiempo Maria de la Paz Espinoza, haciendo las reparaciones  necesarias y los ornamentos eran costeados por ella.

SECTOR EL BOLO
Pero para el año de 1813, en plena Campaña Admirable, el General realista Correa tuvo tropas apostadas tanto en Agua Clara y Carmania.

-La primera casa de comercio en Valera fue de una señora Agueda Gonzalez que siempre estuvo muy bien dotada de mercancía. También era una posada que vendía comida todo el día y se encontraba situada en la esquina de la Av. Feniz, que sería para principios del siglo XX la calle Miranda, actalmente la Calle 8.

- La primera comercio de ropa fue propiedad del Dr. Hilarión Unda, con el tiempo otros comerciantes se dedicaron a ese ramo, como lo fueron los Maya, los Prico, Lucio Lares. Pasando el tiempo también los italianos llegados a esta tierra y que se había casado con valeranas, se dedicaron a esta nuevo negocio.

-En los principios de Valera  y por muchos años se realizaba el mercado los días domingo, venían los habitantes de las tierras altas que eran mayoría.
La fecha del verdadero avance y progreso de la ciudad data de 1870 cuando se comienzan a fabricar muchas casas de tejas que eran fabricadas por Atanasio Maldonado y Fernando Azuaje.

-Una acequia atravesaba toda Valera, desde el sitio de La Gallera, pasa desde el norte atravesando muchos solares de casas, pasando por el centro de la plaza e iba a regar la Hacienda Morón.
- El zanjón del Tigre divide el llano de San Pedro de la recién comenzada ciudad. Esta fue una obra construida por el hombre para poder regar las diferentes haciendas.
AV. 11 ANTIGUO CINELANDIA

-En los cerros que se encuentran al lado de la Urb. Morón, antigua hacienda de la familia Vetancourt, se encontraban cuevas en donde en los inicios de  Valera se encontraron figura de barro y utensilios que datan de muchos siglos.

-El primer cementerio que existió en Valera fue en el terreno que ocupa la iglesia, extendiéndose dos cuadras quizás hasta la calle Peñalver que calculo que era en la calle 8 entre Av. 11 y 12.

El segundo cementerio fue hacia Morón en un camino hacia Motatán, después lo mudaron al final de la calle Peñalver, en donde enterraron a las víctimas de la fiebre amarilla, que asolo Valera en 1853.

Otro cementerio que tuvo Valera fue en la parte occidental del pueblo, comentándose que era cercano a la calle 10, donde ahora se encuentra situado en los terrenos donde se encuentra el ambulatorio Venezuela.

Para principios de 1900, rumbo a su Centenario, la ciudad consta de ocho calles largas alineadas de sur a norte  y 10 trasversales de oriente a occidente.

LOS OTROS BRICEÑO

  Una Mirada a Nuestra Historia José Rosario Araujo No solamente Antonio Nicolás Briceño, el hijo del Doctor Briceño, el Abogado, fue el...