viernes, 25 de mayo de 2018

LA GENTILEZA DEL VALERANO


Transitando Nuestra Historia

José Rosario Araujo
La gentileza y el don del gente de los habitantes de la urbe de Mercedes Díaz fue bastante significativa y representativa de lo que éramos como personas  y era esos dones parte del gentilicio que nos caracterizaba.

Puede; desde muy niño; conocer personas que para mí fueron parte  de esos dones que teníamos. La ciudad de Valera acogió muchas personas que llegaron  tanto de pueblos  vecinos como de estados cercanos, que se adaptaron y asumieron  costumbres valeranas.

Un claro ejemplo de gentileza valerana la tengo que citar en tres personas que para mí eran exponentes de aquella Valera que se nos fue y estas personalidades  se fueron con ella.
Una persona que debo citar por la que guardo un grato recuerdo es a Diego Hidalgo, con él que tuve una gran amistad. Fue el padrino de mi hijo Luis Eduardo y desde su negocio La Democracia, situado en la calle 14 con Av. 8 derrocho a los valeranos gran gentileza y respeto con muchos años de trabajo.
Pude ver todo el aporte comercial que este hijo de Boconó repartió por tantos años. Funda un sólido hogar con su esposa Erenia  y sus hijos.

Fue un hombre lleno de respeto y esa palabra condujo su vida hasta bien entrados los años, ya que Diego Hidalgo vivió hasta los 105 años.
Recuerdo La Democracia con su reparto a domicilio en bicicleta y lo complaciente y educado de Don Diego con sus clientes. Uno llamaba. Tomaban el pedido y te lo llevaba un repartidor en flamante bicicleta.

Me conto mi compadre que él había llegado de   Boconó a Valera a principios del siglo pasado llegando a laboral  con la casa comercial  Muchacho Hermanos,  donde trabajo varios años hasta que llego a fundar su propio negocio,  que primero estuvo situado en la av. 10 que era la calle Comercio de la urbe valerana y luego a su sede de tantos años en la dirección que ya mencione.

Desde mi punto de vista, Don Diego, fue  el último caballero de la ciudad de Valera. Había que ver como ese valerano trataba a las personas, con que respeto y caballerosidad. Hidalgo sentó cátedra de respeto y de hombría de bien y me siento orgulloso de haber contado con su amistad, además de haber sido su compadre. Mi hijo Luis Eduardo siempre lo recuerda; como lo llamaba Toyer y sin lugar a duda influyo en él.
Otra de las personas que recuerdo como un gran caballero valerano, del cual no sé de donde era oriundo,  fue  Hugo Dubuc, el cronista sentimental de Valera, que lamentablemente murió atropellado por un carro.

Siempre se veía por las calles valeranas,  siempre regando amistad y respeto. De Hugo tengo los mejores recuerdos. Fue mi amigo a pesar de la diferencias de edad y creo que muchos personas lo pudimos llamar asi.

Siempre que escucho el  poema de Antonio Machado “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”  recuerdo a Hugo. Ese poema  interpretado  por Joan Manuel Serrat que utilice de tema en un programa que hice en Radio Valera,  cuando le rendí un homenaje a los pocos días de su muerte en el año 2006.

La muerte de Hugo fue lamentada por mucha gente y dejo un gran vacío en Valera ya que no contaríamos con su simpatía y don de gente.
El ultimo que voy a mencionar es el conocido poeta Antonio Pérez Carmona, nacido en Escuque, pero que por muchos años lo vimos transitando las calles de la ciudad. Siempre he pensado que conocer la obra del poeta Pérez Carmona  es imprescindible para los que sentimos a nuestro querido estado Trujillo.

Mucho compartí con él en la Librería Don Quijote en los años 90, donde puede escuchar sus anécdotas y grandes conocimiento sobre la historia trujillana y valerana.
Lo conocí desde hace muchísimos  años y fue amigo mío  como lo fue  su hijo Lenin. Siempre recordare cuando cercana su muerte me dijo que las torturas que le hizo la Seguridad Nacional le estaban pasando factura.

El poeta tambien es parte de esa Valera que debemos recuperar, es muy necesario ya que esa fue la época del respeto y la querencia por nuestra tierra que nos urge recuperar.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

LOS OTROS BRICEÑO

  Una Mirada a Nuestra Historia José Rosario Araujo No solamente Antonio Nicolás Briceño, el hijo del Doctor Briceño, el Abogado, fue el...