Para el año de 1935
el Mariscal de Aire y jefe de la Luftwaffe; Hernán Goering; organiza las
unidades de paracaidistas alemanes. Ya los alemanes al ver a las tropas
soviéticas preparar este tipo de combatientes, ni cortos ni perezosos deciden
implementar esa nueva arma a las fuerzas armadas alemanas.
El paracaidismo en
Alemania comenzó en 1933 como una disciplina civil y como espectáculo ya que el
Tratado de Versalles impedía la aviación militar. Al poco tiempo se creó el
Grupo Paracaidistas Policial “Berlín”
con la firme intención de disolver las manifestaciones de los comunistas.
En la Guerra Civil
Española los alemanes enviaron con la Legión Cóndor 50 paracaidistas, logrando
sobrevivir un poco menos que la mitad.
La primera unidad
paracaidista alemana surgió con el nombre de Regimiento Paracaidista “General
Goering” que estaba comandada por el General Reinhard Heydrich y dos años
después este regimiento fue convertido en el Batallón Paracaidista Especial que
encabezó el desfile militar ante el líder de los Nazis Adolfo Hitler, en la celebración de su cumpleaños.
La Luftwaffe para
la preparación de paracaidistas, escogía
hombres de excelentes capacidades físicas y el General Student se encargaría de
los entrenamientos rigurosos de estas nuevas tropas de elite.
Los guerreros del
aire eran minuciosamente entrenados en ejercicios físicos agotadores y a una
preparación de soldados de infantería,
con saltos en la Escuela de Paracaidismo
de Spandau en donde realizaban un
promedio de seis lanzamientos, siendo el último desde aviones a 140 metros del
suelo, cayendo dispuestos a entablar un combate.
Student preparó sus
tropas en regimientos convencionales de tres batallones, cada una de ellas
integrada por tres compañías de
fusileros y una de armas pesadas.
En 3 aviones podría viajar un
pelotón de 36 combatientes que caerían desde el cielo dispuestos al combate.
Los paracaidistas
alemanes usarían como uniformes unos pantalones anchos, con altas botas de
combate, una chaqueta impermeable y casco de acero. Tenían las armas mejores de
la Wehrmacht, como el fusil de asalto FG 42, utilizado exclusivamente por
ellos, usaban una pistola ametralladora conocida como eructo.
En la invasión de
Polonia no fueron usadas las fuerzas paracaidistas, ya que estas tropas eran
minoritarias y les faltaba veteranía. Se
regaron de rumores de que serian utilizados los paracaidistas, pero a la final no
fueron utilizadas.
Para el año de 1940
se aumentó el número de los paracaidistas a dos divisiones y un número importante de aviones que
estaban formados por Junker Ju 52 y
Planeadores DFS-230.
En la invasión de
Dinamarca y Noruega los paracaidistas del Tercer Reich ocuparon un importante
puente para la conquista de Dinamarca,
en el ataque a Noruega tomarían el aeropuerto de Oslo; en donde aterrizaron
aviones llevando tropas de infantería y
Stavanger se lanzaron oleadas de tropas aerotransportadas, precedidas de un número importante de soldados de
infantería que llegaron en 250 aviones.
En las afueras de
Narvik no tuvieron tanta suerte las tropas aerotransportadas alemanes, ya que cayeron de forma dispersa y con abundantes lesiones.
En otro asalto tampoco contaron con suerte esta nueva arma del ejército alemán
sobreviviendo de 150 soldados solamente 34 combatientes paracaidistas.
En las acciones en
Dinamarca se destacaron; bajo el mando del Capitán Walther Gerike; la Cuarta
Compañía Paracaidista; que saltaron y tomaron por sorpresa las dos bases aéreas
de Aalborg y el Puente de Stoerstrom. Esta operación permitió que los Panzer
tomaran la capital Copenhague.
En Noruega otra
compañía de paracaidista; la 3ª comandada por el Comandante Freiherr Von
Brandis; aplastó al ejercito noruego, además otro grupo de tropas
aerotransportadas liberan unas tropas alemanas que estaba asediadas por los
ingleses y franceses, haciendo que huyan.
El 10 de mayo de
1940 realizan la “Operación Granito” un número importante de paracaidistas
alemanes tomando el Fuerte Eben Emael, que era un complejo defensivo de la
resistencia en contra de la invasión alemana que era considerada como una
posición inexpugnable.
Esta instalación
militar era un anillo defensivo de la ciudad de Lieja. Medía 700 metros de
ancho de este a oeste y 900 metros de largo de norte a sur, con casamatas de
artillería e infantería. La artillería contaba de dos piezas de 120 mm y
cañones de 75 mm.
Esta instalación
militar estaba integrada por una serie de búnkeres que estaba unido por una red
de túneles de siete kilómetros que contaba con agua corriente, baños, un
hospital y cocina, todo esto alimentado por una planta eléctrica.
Esta acción fue una
de las más destacadas de los grupos de operaciones especiales en la II Guerra
Mundial ya que un número reducido de paracaidistas neutralizan un grupo de un
millar de hombres.
Desde mi punto de
vista las acciones más destacadas de los paracaidistas alemanes fueron las del
Fuerte Eben Emael y la Invasión de
Creta.
Este audaz plan de
tomar el fuerte Eben Emael desde el
cielo fue realizado por el General Paracaidistas Kurt Student quien
preparó a 500 hombres que eran
comandados por el capitán Koch, que se dividieron en cuatro secciones que eran
una integrada por 85 paracaidistas conocida como “Granito” que tenían la orden
de tomar el fuerte y tres que eran conocidos como la “Hierro” que tomaría el puente Canne.
Hitler había
presentado a Student un explosivo de carga hueca portátil que era capaz de
destrozar muros de hormigón o de acero. Se podía llevar en cargas de 5 hasta de 50 kilos.
Los atacantes
alemanes eran integrados por dos
oficiales, 73 paracaidistas y 11 pilotos de planeadores en el grupo “Granito”
que estaría regido por el teniente Witzig. Estos grupos de paracaidistas fueron
entrenados en las montañas Harz en los despliegues rápidos al salir de los
planeadores, entrenaban el asalto sobre nidos de ametralladoras con técnicas
para utilizar el nuevo explosivo.
Pasaron muchas
horas los comandos paracaidistas preparándose para tomar fortificaciones, aprendiendo la estructura de
las fortificaciones del Fuerte Eben Emael. Mientras tanto los pilotos de los planeadores practicaron aterrizar en
campos similares a los que se encontrarían en la fortificación, la idea era aterrizar
a un poco menos de 20 metros de sus
objetivos para evitar de la mejor forma
el fuego enemigo.
En once planeadores
que eran remolcados por aviones JU-52, estos planeadores podían transportar a
nueve soldados con todo su armamento.
Tenían la intención de llegar a la posición enemiga sin hacer
ruido. Los planes que llevaban los paracaidistas eran acabar con explosivos y
destruir los portones para evitar que las fuerzas enemigas contraatacasen, de
esta manera el fuerte seria una cárcel para los belgas.
Temprano en la
madrugada llegaron los paracaidistas al fuerte desatándose un nutrido tiroteo
que sorprende a belgas que nunca se imaginaros que iban a ser atacados desde el
cielo.
Los 78
paracaidistas alemanes aterrizaron sobre
el techo del fuerte, tomando prisioneros a los encargados de los artilleros del fuego antiaéreo. Ellos
logran mantener a raya a 1200 soldados belgas.
Los soldados del
fuerte estaban integrados por tropas
inexpertas que sonaron las alarmas equivocadas que advertían que el ataque
provenía de las aéreas circundantes a la fortaleza y no de la parte superior
del edificio.
Los comandos
paracaidistas emplean los explosivos y
se lanzan en ataque dentro de la fortaleza, produciendo confusión en los
belgas. Muchas de las casamatas eran falsa y solamente en una hubo resistencia
pero fueron aniquilados.
La resistencia
belga duró 24 horas pero los alemanes con su rápido ataque logran reducir a los
defensores escribiéndose una página más en las operaciones especiales, aunque
estos paracaidistas en esta época no se podían catalogar como unidades de
operaciones especiales como los SEAL o los Spetnak rusos, en esa época eran los más preparados de la época.
La otra acción que
considero la segunda de más importancia de las fuerzas aerotransportadas
alemanas fue la invasión a la isla de Creta, aunque fue el cementerio del los
ataque aerotransportados alemanes.
Creta era una
posición de mucha importancia, ya que esta isla era la de mayor tamaño del mar
Egeo.
Estaba en manos de
los ingleses y desde allí podían la
armada y la aviación británica realizar
operaciones ya que contaban con tres aeródromos, situados en Malema;
que eran en la costa norte; en Retimo; al este y en Heraklion al este de
estos.
La Real Fuerza
Aérea asolaba el sur de Italia y Los Balcanes, con sus bombardeos, además de
defender las posiciones inglesas en Libia y Egipto.
Las fuerzas del Eje
tenían la intensión de tomar la isla con la firme intención de acabar las comunicaciones de los británicos en las
posiciones que nombramos.
El 6 de abril de 1941 los alemanes invadieron Grecia y Yugoslavia con 600 mil
soldados, En Yugoslavia el Ejercito es aplastado y la población es reprimida salvajemente,
pero al final los nazis no logran imponerse debido a la resistencia de sus partisanos
comandados por el famoso Tito.
Los griegos que
había derrotado a los italianos, son sometidos por 15 divisiones alemanas. Los
ingleses apoyan a los griegos, pero se tienen que retirar hacia las
Termópilas,por la capitulación de los griegos.
El gobierno griego
desde Creta trata de organizar la resistencia acompañados por el resto de las
tropas de Inglaterra.
El 20 de marzo de
ese año la aviación alemana ataca a Creta. El General Bernand Freyberg le es
confiado el comando de las fuerzas inglesas y griegas. El jefe de los
británicos en el Oriente Medio Wavell, estaba consciente e informado de los
preparativos que hacia Hittler para un ataque por mar y por tierra contra la
isla.
Inglaterra no le quedaba más alternativa de resistir en Creta el mayor tiempo posible
Wavel informaría a
sus superiores de poder defender a Creta de un ataque si se contaba con
artillería, transporte, aviación y tropas suficientes.
Churchill no estaba
muy seguro, tenia dudas de la
resistencia duradera contra un ataque
alemán. Estos se encontraban situados en el extremo sudoeste de Europa. La
Luftwaffe no podía apoderarse de nuevas
bases para lanzar un gran ataque en contra del Oriente Medio.
La RAF no ayudaría
mucho a no querer situar su aviación permanentemente por las grandes perdidas
que sufrieron en Grecia.
Freyberg considero
que los cuatro puntos cardinales para la defensa de la isla, pero cada uno
independiente, debido a lo dificultoso de sus comunicaciones y lo deteriorada
de sus carreteras.
Las fuerzas de
Churchill contaban con 15 carros de asalto ligeros y seis tanques de
infantería. Tenían como talón de Aquiles que el abastecimiento en Creta era
cada día más difícil.
Los alemanes se
preparaban para realizar el ataque para
el 17 de mayo, conocida como Operación Mercurio, pero tenían una falsa idea de la situación de la
isla, subestimaron a los británicos .
Primero bombardearon
los aeródromos de Málema y Heraclión y en el segundo ataque comenzaron
el lanzamiento de paracaidistas, que sufrieron grandes pérdidas.
Las misiones de
reconocimiento de la Luftwaffe eran poco efectivas y las posiciones inglesas como estaban muy bien
camufladas, eran trampas con las cuales se enfrentarían los paracaidistas
alemanes,
Student había
planeado efectuar tres asaltos. Dos días después el ataque había sido un
fracaso. La tropas alemanas eran recibidas desde el suelo con fuego de las
ametralladoras británicas Bren y Lewi, produciendo grandes bajas en las fuerzas
aerotransportadas tanto por el fuego antiaéreo, como por las fallas mecánicas
de los planeadores que los transportaban.
Muchas de estas
tropas cayeron encima de las tropas inglesas, que estaban dispuestos a defender
la isla a toda costa.
En la posición de
Máleme defendida por el 22° batallón neozelandes comandado por el Teniente
Coronel Andrew al no tener comunicación con el Cuartel General decide retirarse
en la noche y eso produce a la larga la perdida de Creta.
Para la defensa de
este bastión de Creta, las fuerzas británicas utilizaron la aviación desde que
comenzó el ataque a isla. Pero esto no fue una ventaja y Freyberg
imposibilitado para frenar el avance alemán, tiene que reunir sus hombres y
desde la bahia de Suda defiende las posiciones que le quedan.
Las fuerzas de
Musolini al ver los resultados obtenidos por los alemanes deciden participar en
los combates y eso elimina la posibilidad de que las fuerzas de Freyberg se
replieguen a la parte oriental de la isla, pero esta participación no cambia el
resultado de los combates.
Para el 26 de mayo
se deteriora por los ataques alemanes y el General Freyberg ordena la retirada
para el día siguiente.
Dos
días después continua la evacuación de los británicos y la Marina realiza una
proeza, logrando embarcar más de la mitad de los soldados.
Freyberg
y sus tropas combatieron desde el principio con la convicción de ser
derrotados. Al principio le dieron un golpe muy contundente a los alemanes,
pero fueron incapaces de realizar un contraataque enemigo.
Student
cometio el error de realizar tres ataques aerotransportados en vez de ser una
sola ofensiva masiva.
El
combate de Creta costo al bando alemán
6500 entre muertos y heridos; el 25 por ciento de los paracaidistas y a los
ingleses un promedio de 15000 combatientes.
Los
paracaidistas alemanes sufrieron grandes perdidas en Creta y el máximo líder de
los nazis, no quiso utilizarlos en combates importantes, a pesar de la victoria sobre los ingleses en Creta.
Realizarían algún raid de poca importancia, entre ellas la liberación de Benito Mussolini por Otto Skorzeny, pero pasarían a la historia en las páginas de las tropas de operaciones especiales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario