LA RETIRADA DE GONZÁLEZ PACHECO

Combatiendo la Revolución Libertadora

José Rosario Araujo

Estando el caudillo liberal Gral. Gonzalez Pacheco de Gobernador de Barquisimeto y Jefe del Ejercito Nacional Restaurador el 11 de agosto de 1902 es informado que un ejercito de la Revolución Libertadora dirigido por los Generales Solaigne, Montilla “El Tigre de Guaito” , Cedeño y Riera se encontraban en Duaca y se dirigían a Barquisimeto.

González Pacheco envía una avanzada de exploración comandada por el General Beltrán Bodas Robles quien le informa que la Libertadora se encuentra a cinco leguas de Barquisimeto. El trujillano sabe que su situación no es favorable ya que solo cuenta con 360 hombres y toma la decisión de apartarse de la ciudad y situarse en la Caja de Agua.

En el sitio se entera que el Tigre de Guaito con 1000 hombres se sitúa en Guaiquita, Riera en la cuesta de Lara con 2000 combatientes, Cedeño en el cerro de Bombano y Solaigne en Barquisimeto quedando el defensor de la Restauración completamente sitiado.

El militar trujillano comanda a los Generales Angel Bodas, Rafael Carrillo Heredia y José Garbi a tratar de buscar una ruta para retirarse sondeando el camino de Rio Arriba, buscando la altura de Sarare, estos se encuentran con fuerzas del Tigre produciéndose una escaramuza donde es tomado como prisionero Carrillo Heredia.

González Pacheco encomienda a sus tropas para siquiera por el Río Turbio y al acercarse a las tropas de Montilla prefiere no responder a los fuegos siguiendo la retirada.

El liberal trujillano había recibido las ordenes del Gral. Gómez de resistir en Barquisimeto, pero para resistir las fuerzas del gobierno solamente contaban con 400 soldados.

Era necesario resistir en la ciudad, pero las fuerzas de la Revolución Libertadora era muy numerosas y González Pacheco tiene que evacuar la ciudad el 13 de agosto y salvar la gran cantidad de municiones con que cuenta, evitando que caían en las manos del enemigo.

La Libertadora cuenta con cinco mil hombres, comandados por Riera, Batalla y Montilla y para las fuerzas gobierneras era una locura con tan pocos hombres con que contaban para enfrentar a esas tropas.

Las tropas de Riera tomaron las posiciones desde Tarabana hacía la Cruz Blanca, alumbrados por la luz de la luna, que pronto es oscurecida por un gran aguacero, razón que aprovechan las tropas del gobierno para pasar sin ser vistas.

Varias veces las fuerzas de González Pacheco en su huida sostienen escaramuzas con fuerzas de la Libertadora. Pasaron hasta tres días de marcas seguidas sin comer.

La única vez que se detiene para comer son atacados, apareció el enemigo dirigidos por Riera y el General González da ordenes a uno de sus generales llamado Jiménez Loyo que detuviera con 60 hombres a los atacantes.

Mientras ensillan a las bestias que trasportaban el parque ordena al Coronel Henrique Tovar y a Juan Baptista de auxiliar a Jiménez Loyo. Estos son cercados por el enemigo.

Logran atravesar Urachiche y Chivacoa, llegando hasta el Cerro del Mango, en el camino de Nirgua, que es asta donde es perseguido por las fuerzas de la revolución.

El Lagartijo trujillano siempre en retirada, cumpliendo las ordenes de Gómez, logra salvar al parque uniendose a las fuerzas de Castro, en donde se encontraban una fuerza trujillana, dirigida por Manuel Salvador Araujo, antiguo enemigo.

Se les incorpora el liberal que tanto había luchado para conservar el parque, tejiendose una pagina más de heroísmo en nuestros caudillos trujillanos.